Balance positivo del año de gestión del PP en Pepino y urbanizaciones
El primer edil, Inocencio Gil, expone que su Gobierno está saneando las cuentas que dejó el anterior Gobierno y apuesta por el ahorro y la reducción de gastos.
miércoles 23 de abril de 2014, 10:51h
Durante el primer año de gestión del Partido Popular en Pepino con el alcalde Inocencio Gil Resino se ha realizado el siguiente balance de acciones: en primer lugar, este mismo, ha recibido personalmente a 1.210 personas para atender e intentar solucionar sus problemas. En segundo lugar, en cuanto a las infraestructuras realizadas, están las obras realizadas de adecentamiento y arreglo de calles del pueblo y las urbanizaciones, se han iniciado, y además se encuentran en estado muy avanzado las obras del Centro de Atención a la Infancia (CAI) y se ha conseguido mantener el Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) con el mismo número de miembros a pesar de los recortes. Se ha hecho frente al pago de 11 contenciosos anteriores que generó el ex alcalde mientras que en el ejercicio del primer año de gobierno del PP no ha habido ninguno. Además, el ahorro y la gestión eficiente han sido las principales características del año: el coste del Festival Taurino de Febrero ha costado 20.000 euros, 57.000 euros menos que el año anterior.
Entre otras de las actuaciones realizadas por Gil Resino se encuentran las obras del colector de aguas residuales de Prado del Arca, la próxima instalación de un Punto Limpio para los Polígonos industriales de Pepino, las primeras conversaciones para formar parte del área metropolitana de Talavera y la gestación de un proyecto deportivo del que pronto habrá noticias.
Respecto a los 300.000 euros que recibió el ex alcalde en 2010 en licencias de obras para el proyecto del edificio consistorial, el nuevo equipo de gobierno ha recibido tan sólo 18.000 euros. El nuevo Gobierno no entiende en el interés de edificar ahí en vez de la plaza del pueblo donde los terrenos eran más baratos. El proyecto del ex regidor ha endeudado al actual edil en 1.500.000 euros.
Además, al acatar el cargo de alcalde, Gil se encontró con cerca de 500.000 euros pendientes de pago, entre los que se encontraba una factura de Aqualia reconocida y pendiente de pago desde 2008 que ascendía a unos 400.000 euros y que el actual Gobierno ya ha liquidado. El ex alcalde además omite que en 2011 utilizó buena parte del presupuesto en pagar facturas que tenía pendientes con familiares de concejales, algunas de ellas “incluso sin asignación presupuestaria” cuya partida ascendía a unos 35.000 euros y que el equipo de gobierno ya ha hecho frente a su pago, según relata el Ayuntamiento en nota de prensa. Como conclusión, Gil resumen que su Gobierno se ha basado en pagar las deudas contraídas o tapar los agujeros ocasionados en el pasado, además de apostar por el ahorro, la reducción de gatos y el interés común de todo el municipio.