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Mensha disputa un balón ante la atenta mirada de Roberto. (Foto: Carlos Granda) |
Ceden el liderato
El Talavera no consigue ofrecer su mejor imagen en Las Delicias y pierde los tres puntos, el primer puesto, el golaverage particular con su máximo rival y la oportunidad de dar un golpe de efecto a la liga.
miércoles 23 de abril de 2014, 10:51h
Eran el escenario y el rival perfectos para reivindicar la hegemonía llevada a cabo durante gran parte de la competición pero el guión no salió según lo esperado para los intereses blanquizales. El Talavera saltó al césped de Mora agarrotado y, a pesar de contar con bastante pólvora en el ataque, dejando la sensación de que el empate era el resultado anhelado. Los morachos, por su parte, demostraron por qué nadie ha sido capaz hasta la fecha de arrancar un solo punto de Las Delicias esta temporada y llevaron el peso de un partido que acabaron ganando con dos tantos en la recta final del mismo.
En un encuentro trabado, tosco y cargado de nervios y respeto por ambas partes los locales consiguieron hacerse con la batuta del partido y suyas fueron las mejores ocasiones del primer acto para abrir el marcador. Pablo con un lanzamiento que se marchó desviado y Moisés con un fuerte disparo bien respondido por el meta Ángel Luis estuvieron muy cerca de inaugurar el electrónico de Las Delicias. Ibra, por el bando talaverano, disfrutó también de una excelente ocasión para abrir la cuenta de su equipo pero su disparo se estrelló en el cuerpo de Puma cuando el delantero blanquiazul lo tenía todo para anotar un tanto que, quizá, podría haber cambiado el devenir del partido.
En el segundo acto Fran Sánchez intentó ganar consistencia en el centro del campo con la entrada de Juli y, aunque el equipo consiguió mejorar el discurso ofrecido en la primera mitad, lo cierto es que no logró llevar demasiado peligro hasta el área de Puma. Un remate sin consecuencias de Mensha y una doble oportunidad de Bayarri fueron las acometidas talaveranas en este periodo. Los locales, sin demasiados alardes, se sacudieron el dominio blanquiazul con el que había arrancado la segunda mitad y en la recta final del partido, cuando parecía que ambos daban por bueno el empate, consiguieron penetrar en dos ocasiones en la zaga blanquiazul para herir de muerte al Talavera.
Márquez, que había recibido el balón en una posición más que dudosa y muy protestada por los visitantes consiguió batir a Ángel Luis en el mano a mano y Portillo, momentos después y con los cerámicos contra las cuerdas, dio la puntilla a los de Fran Sánchez con un gol que rubricó el 2-0 final. Manasé, con el partido ya finiquitado, fue expulsado tras ver la segunda amarilla por una inocente acción tras anticipar el saque de una falta.
El Talavera perdía los tres puntos, el liderato, el golaverage con su máximo rival y la oportunidad de dar un golpe de efecto a esta liga. No obstante, todavía queda mucha competición y este equipo tiene argumentos y plantilla para recuperar el mando en la tabla y lograr el objetivo del ascenso. Una meta que presumiblemente podrá conseguir con el apoyo de una afición entregada que se desplazó en masa hasta Mora y que no paró de animar a los suyos incluso una vez certificada la derrota. Se ha perdido una importante batalla pero todavía queda mucha guerra y hay motivos más que sobrados para confiar en este equipo.