Los chistes no son cuentos

Si Jaimito cuenta chistes, el autor de los chistes sobre Jaimito es un cuenta cuentos. Jaimito/Pepito/Benito es el protagonista de los chistes de Jaimito, un niño pequeño y travieso que continuamente hace preguntas pícaras y bromas; chistes que tratan a menudo de temas sexuales considerados de mal gusto.

Cierto día, el poeta León Felipe explicó que aunque no sabía muchas cosas sabía todos los cuentos: que la cuna del hombre la mecen con cuentos, que los gritos de angustia del hombre los ahogan con cuentos, que el llanto del hombre lo taponan con cuentos y que los huesos del hombre los entierran con cuentos. Ah, y también que el miedo del hombre ha inventado todos los cuentos y que le duermen con todos los cuentos. También explicó que sabía todos los cuentos y que no sabiendo los oficios se hacen con respeto; que para enterrar a los muertos como debemos cualquiera sirve menos un sepulturero.

Los cuentos que uno sabe y no cuenta son los cuentos del pasado, chistes que a veces son los cuentos del futuro.

Desconozco si destapar escándalos es una jodida irreverencia. Ignoro también si poseer una noticia y no publicarla es una cabronada. Aunque conocer un problema no ayude a la solución, en mi caso juego con la ventaja de que cuando el director me publica lo que quiero publicar no me lo censura. Aclaro también que en este Vado Permanente pre vacacional los chistes no son cuentos aunque algunos de los paseos programados y mediáticos de nuestros políticos sea un cuento/chiste que intenta ahogar la angustia de los sufridores del pueblo.

Como los chistes casi nunca son cuentos, los pactos de Gobierno de esta semana sin tregua ni con el safety car de la organización consigue componer la pole position de los participantes sin escrúpulos.