El Gobierno regional valora positivamente que se rechace la enmienda a la totalidad del PP, que supondría recortar 200 millones el gasto social
El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha detallado que estos recortes del PP pondrían en juego, por ejemplo, las ayudas de Emergencia Social, el Ingreso Mínimo de Solidaridad, el Plan Adelante o el Plan de Empleo.
jueves 31 de marzo de 2016, 13:19h
El Gobierno de Castilla-La Mancha valora positivamente que las Cortes regionales hayan rechazado la enmienda a la totalidad del PP a la Ley de Medidas Administrativas y Tributarias, ya que la orgía de rebajas fiscales que proponía, junto a la recuperación en un solo año de todos los derechos arrebatados a los empleados públicos en la anterior legislatura, habría supuesto recortar 200 millones el gasto social. El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha intervenido en el debate celebrado en las Cortes regionales para defender el presupuesto y la propuesta fiscal para 2016 del Gobierno de Emiliano García-Page, que supone “una enmienda a la totalidad a la gestión del PP” durante los últimos cuatro años. Ruiz Molina ha confrontado, por tanto, “dos políticas tributarias distintas”, que implican “dos modelos de sociedad diferentes”. Por un lado, la “política tributaria progresiva, solidaria y justa para garantizar una sociedad asentada en el Estado de bienestar y en la creación de empleo y riqueza” que defiende el Gobierno de García-Page, y, por otro, la “política tributaria regresiva, insolidaria e injusta” del PP, que promueve “una sociedad que favorezca principalmente a los que más tienen y no pueda atender con garantías a los que menos tienen”. El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas ha explicado que la propuesta del PP en su enmienda a la totalidad consiste en “una orgía de rebajas fiscales que supondrían, según han estimado los técnicos de la Junta, 115 millones de euros menos de ingresos para el erario público en 2016. A esta cifra, ha continuado el titular de Hacienda y Administraciones Públicas, habría que “sumar otro 90 millones que quieren que se destinen a recuperar en un solo año los derechos que arrebataron a los empleados públicos en cuatro años” para presentarse en la oposición como “su abogado defensor tras ser sus peores verdugos en el Gobierno”. Por lo tanto, lo que propone el PP, solamente con estas dos medidas, supondría recortar concretamente 205 millones de euros. Sin embargo, ha resaltado Ruiz Molina, el PP “no especifica en qué partidas metería la tijera” para compensar esos menores ingresos, que, evidentemente, supondrían “recortes en el gasto social o destinar menos presupuesto a la creación de empleo y a la generación de riqueza”. Por todo ello, el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas ha animado al PP a dejar a un lado la demagogia y explicar “cómo cuadra eso” porque la otra posibilidad es seguir haciendo lo que estos últimos cuatro años “inflando ingresos, realizando recortes y no presupuestando suficientemente determinados gastos”, lo que llevó a “duplicar la deuda y a incumplir el déficit todos los años”.
“El PP ataca la línea de flotación de la recuperación social y económica de Castilla-La Mancha” Ruiz Molina ha detallado ante las Cortes regionales el impacto presupuestario que supondría esta merma de ingresos que propone el PP con su propuesta fiscal. Así se pondría en juego el programa de Ayuda a Domicilio; el Plan Adelante; las subvenciones para el mantenimiento de centros y servicios destinados a la atención de personas con discapacidad o eliminar todo el anexo de inversiones del programa presupuestario de conservación y exploración de carreteras. Según ha explicado el consejero, también el PP pondría en peligro las ayudas de Emergencia Social, el Ingreso Mínimo de Solidaridad, la promoción de la vivienda pública, la gestión del funcionamiento de los centros de la mujer y recursos de acogida o el Plan Extraordinario por el Empleo, entre otras. Estas son solo algunas, ha destacado Ruiz Molina, de las “once sonoras y dolorosas bofetadas a la recuperación social y económica de Castilla-La Mancha” que daría el PP con su propuesta tributaria. La reforma fiscal del Gobierno respeta los objetivos de estabilidad sin aumentar la presión fiscal Por último, el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas ha resaltado que la reforma fiscal que plantea el Gobierno de García-Page, además de estar diseñada, al igual que los presupuestos, para respetar los objetivos de estabilidad presupuestaria y cumplir los compromisos con los ciudadanos, se basa en rebajar los impuestos a los que menos tienen y exigir un poco más a los que más tienen para disponer así de mayores recursos para atender a los más vulnerables. Así, Ruiz Molina ha recalcado que no se fríe a impuestos a los ciudadanos, como ha querido hacer creer el PP, ya que se eliminan tasas y se aumentan exenciones, que beneficiarán a 78.000 contribuyentes, y se congelan todas las tasas que quedan vigentes. Además, el 98% de los ciudadanos no tendrá que pagar el impuesto de Sucesiones y el de Donaciones se abonará en las mismas condiciones por el 98% de la población. Por otra parte, no se modifica ni el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas ni el impuesto sobre Patrimonio, por lo que la propuesta fiscal no afecta a la actividad empresarial, tal como ha afirmado CECAM, sino que, por el contrario, es “realista y se basa en el principio de solidaridad”.
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