Don Juan, en la inmortal obra de Tirso de Molina "El burlador de Sevilla", repetía una y otra vez esta frase para desentenderse, por lejano , del castigo que la justicia divina le tenía reservado a cuenta de una vida llena de pecados. Pero después de varios siglos desde el nacimiento del Tenorio, el uso que de está frase se hace en el castellano abarca también el significado de no aceptar promesas y soluciones que se demoran en el tiempo de una manera excesiva.
Pues bien, compruebo como últimamente todas las energías de los políticos locales van dirigidas a proyectos cuya consecución, de llevarse a cabo, ocurriría en un horizonte temporal de bastantes años, tan lejos de nuestro presente que en el hiper optimista supuesto de que realmente esto suceda, es probable que no quede ningún talaverano para disfrutar de ellos.
Mientras llega el llamado "Nodo", el "AVE" de leyenda hace parada en esta ciudad, la A5 se desdobla, la Universidad deja de ser poco mas que unas migajas de consolación, etc, etc, la población de Talavera habrá,entre fallecimientos y emigraciones, descendido a unos niveles que harán inútiles todas estas maravillas que esperamos como maná caído del cielo y convertirán a Torrijos en una gran urbe al lado del pequeño pueblo despoblado que será Talavera.
Pero aquí se continua con una variación sobre la expresión "pan para hoy y hambre para mañana" que es la de "hambre para hoy y pan te prometo mañana". Prometió con efervescencia el actual presidente de la Junta, promete ahora la expresidenta Cospedal. Todos prometen pero ninguno ha demostrado interés por esta ciudad que se encuentra yerma de políticos de altura que trabajen por Talavera y no se limiten a obedecer fielmente la voz de su amo.
Necesitamos una respuesta cívica, una reacción ciudadana que demuestre que no se acepta resignadamente el negro futuro al que nos aboca irremediablemente la inoperancia y desinterés de los responsables políticos, no de todos, eso sí,porque hay algunos a los que realmente les mueve la vocación de servir a sus conciudadanos.
Ojalá Talavera hable,hable con un clamor imposible de eludir, hable directa y claramente pidiendo algo tan sencillo como complicado: sobrevivir.