La presencia masiva de mosquitos en la Ronda Sur mantiene en jaque a los vecinos de la zona
Ciudadanos y hosteleros han mostrado su malestar al Consistorio y, aunque se ha fumigado el lugar en los últimos meses, la proliferación de estos insectos continúa generando molestias en la población
jueves 25 de junio de 2015, 10:15h
La llegada del calor y la humedad ambiental propias de la época estival traen hasta las riberas del Tajo millares de incómodos "visitantes" que traen de cabeza a los vecinos de la zona de la Ronda Sur y los numerosos viandantes que transitan a diario por la zona. Se trata de los mosquitos, insectos que proliferan en los espacios húmedos del río y que forman, a ciertas horas del día, auténticas plagas en las vías ubicadas junto al Tajo y se cuelan en los hogares de cientos de vecinos de la zona con las consiguientes molestias que esto genera.
Por ello y, bajo iniciativa ciudadana, se han remitido diversos escritos al Ayuntamiento con el objeto de paliar una situación como el impulsado desde la Asociación de Vecinos San Jerónimo del Casco Antiguo. Según explicó a La Voz del Tajo el presidente del colectivo, José Luis Prado, la zona del Tajo "está inviable", los vecinos han hecho llegar al Consistorio un escrito "pidiendo que se fumigue por el bienestar de los ciudadanos, es una zona por la que transita muchísima gente y es insufrible".
En pleno cambio de legislatura, el edil 'popular' Antonio Álvarez acaba de asumir la Concejalía de Sanidad por lo que será el encargado de lidiar con este problema durante el verano. No obstante, según reconoció Florencio Gutiérrez, anterior concejal del área, durante las últimas semanas se han realizado diversos trabajos de fumigación, aunque los resultados no parecen haber dejado satisfechos a los vecinos.
Los hosteleros que cuentan con locales en la Ronda Sur y que tienen en las terrazas propias de esta época una fuente importante de ingresos también han mostrado su malestar por una situación que afecta de manera muy directa a sus negocios. En este sentido, también se ha llevado a cabo en la última semana una recogida de firmas que ha superado el millar entre los establecimientos de la zona, ya que, según han reconocido diversos hosteleros a este medio, la presencia masiva de mosquitos hace que durante la noche se vean obligados a bajar la intensidad de la iluminación para paliar, en la medida de lo posible, molestias para su clientela. Pero no sólo pululan por la zona mosquitos que molestan a los viandantes con su presencia y se ha detectado también la presencia de una especie cuyas picaduras resultan bastante incisivas. En este sentido y, según ha podido saber La Voz del Tajo, son varios los afectados que, tras los picotazos de estos insectos, han tenido que acudir hasta el Hospital para recibir inyecciones de Urbason con el objeto de disminuir la generación de inflamaciones en la piel y los molestos picores.
Plataforma del Tajo: "Un río sin agua es un charco de suciedad ideal para que proliferen mosquitos"
La problemática de los mosquitos se debe, según la Plataforma del Tajo, al estado que presenta actualmente el río a su paso por la Ciudad de la Cerámica. "Estamos ante un asunto político, si dejas un río sin agua es un charco de suciedad y se llena de mosquitos", apuntó el integrante del colectivo, Miguel Ángel Sánchez. En este sentido, Sánchez lamentó que los talaveranos "atravesamos una cloaca de aguas residuales, pedimos que el Tajo sea un río y no un charco de aguas residuales donde la suciedad se acumula y, ahora que las temperaturas suben, los mosquitos proliferan por millones". En cuanto a la situación generada por estos insectos, aseveró que "tenemos suerte de estar en el siglo XXI y que la población está en condiciones aceptables ya que en el siglo XVII sería fatal". Una lacra que, además de Talavera, afecta a otras poblaciones bañadas por el Tajo como es el caso de Toledo, donde en los últimos días tanto vecinos como pescadores han sufrido además molestas picaduras de los mosquitos. Más allá de fumigar periódicamente la zona, Sánchez apuntó que la solución a este problema "es muy sencilla y se puede hacer en 24 horas, basta con soltar el agua de la Presa de Castrejón entera para que hubiera en Talavera una pequeña crecida de unos 100 o 200 metros cúbicos por segundo durante un día, así todos los mosquitos y las larvas desaparecerían y luego habría que mantener un caudal ecológico decente.