El vicepresidente de la Diputación de Toledo, Jaime Ramos, mantuvo que siguen considerando “graves” las compras que se realizaron cuando José Gutiérrez era el responsable de Economía de la institución provincial, aunque mostró su “más absoluto respeto a la decisión de la fiscal y la futura resolución judicial del asunto”.
Aunque la fiscal que lleva el caso ha pedido el sobreseimiento de la causa por la que se imputó a Gutiérrez, Ramos señaló que “sean o no constitutivos de delito, que corresponde decirlo a los tribunales, creemos que queda una explicación a los ciudadanos”, en relación a los 300.000 euros que se gastaron en un material que, a su juicio, “no hacía falta”, y que “se pagó por encima de su valor y se guardó en un almacén”.
El también alcalde de Talavera añadió que cuando la Junta de Gobierno de la Diputación reciba la notificación analizará las actuaciones que llevarán a cabo, momento en que decidirán, en base a la resolución judicial, si el procedimiento sigue adelante o llega a su fin.
En la misma línea, Ramos dijo que “como soy el candidato parece que soy el culpable de todo”, y recordó que desde el Partido Socialista no ha escuchado tampoco ninguna valoración sobre la petición de la Fiscalía Anticorrupción de que se archive el caso contra Cospedal y otros dirigentes del PP regional, ya que no ha encontrado indicios de delito en el supuesto pago de 200.000 euros para la campaña electoral de la hoy presidenta de Castilla-La Mancha a cambio de una contrata, así como tampoco en otras entregas de dinero B que recogen los papeles del ex tesorero del PP Luis Bárcenas.
Sobre las posibles medidas que podrían tomar en el PSOE de obtener la razón del juez, el popular dijo que si van contra su persona “acudiré donde haga falta, aunque no sé en que sentido nos denunciarían”.
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